Dice el dicho que nadie es profeta en su tierra. Un poco de eso le pasó al beltranense Chula Ignazi, quien hizo un aporte invalorable a chacareros de la isla de Choele Choel con su minucioso registro de temperaturas y lluvias durante varios años pero nunca fue reconocido ni en vida ni post mortem. La prueba de su compromiso con su trabajo en la vieja Chacra Experimental de la localidad de Luis Beltrán se puede observar en esta publicación, con un detalle preciso de temperaturas registradas en la región del Valle Medio y que servían para analizar la evolución del clima año a año y prever posibles heladas. También el tema de la lluvia no era menos importante, considerando que muchos cultivos se pueden ver beneficiados o perjudicados según la menor o mayor caída de agua, más allá del riego.
Sin computadoras ni programas como el Excel que facilitan de sobremanera el manejo de la información, el Chula se las arregló para su tarea de carácter casi científico y hacer su aporte a la chacra vallemediense (en muchos casos, totalmente ad honorem).
Posdata: ya en un anterior escrito había hecho mención a esta enjundiosa labor de mi viejo pero cada tanto, no está mal, ponerla a disposición de las nuevas generaciones.
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Eran épocas en que se trabajaba sin horarios y sin cobrar horas extras, el deber estaba sobre cualquier otra obligación, se consumìan horas arrebatadas al descanso. Eso era cosa normal en el Chula, la prioridad siempre fueron los productores. Por lo general, los reconocimientos oficiales son esquivos. Lo màs importante es que la labor desarrollada por el Chula ha dejado una huella indeleble, generando nuevas posibilidades para el desarrollo agro-industrial de la región vallemediense, dejando una impronta de trabajo y responsabilidad.
Por uno de mis trabajos anteriores pasaba por LUIS BELTRAN a visitar a mi querida madre y a mis no menos queridos y respetados hermanos. Solía par la noche con ellos, y frecuentemente se levantaba CHULA, hasta que le pregunté si le pasaba algo, y lacónicamente me contestó. De Salud Nada, si a eso va la pregunta.
En matemáticas, Estadística más claro, se la conoce como normal distribución de Gauss. Este tipo de distribución que, en líneas generales, siguen las mismas medidas tomadas varias veces,(es lo que hacía el CHULA) donde la variación de una cantidad (x) respeto de un valor (µ) es completamente aleatoria. Entonces una distribución normal tiene una función de densidad de probabilidades.
Esta aplicación le da sin dudas el carácter de “científico” al trabajo riguroso del CHULA.
La formula matemática la he publicado hace un tiempo, pero en bastante difícil de leer y adaptar su interpretación.
HANS
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Tengo que agregar que
AGREGADO PARA ACLARAR DE QUÉ SE TRATA.
Tengo que agregar que la normal distribución de Gauss, se trata en términos de análisis matemático de II nivel Universitario de una FUNCIÓN INTEGRAL, que no tiene DERIVADA total, sino una pequeña parte del apéndice del ala izquierda de la función.
HANS
Ampliando el concepto sobre el muy interesante tema en cuestión, podemos decir que los registros de las precipitaciones son, en muchos casos, datos necesarios para llevar a cabo trabajos de investigación como bien lo señala el amigo Petizo y, asimismo, se pueden utilizar para la elaboración del balance de agua en suelo.
Uno de los insumos imprescindibles para aproximarse al estudio y conocimiento de un fenómeno como la precipitación son los datos observados. A partir de su tratamiento e interpretación, es posible planear procesos y/o formular y plantear alternativas de solución, logrando finalmente, disminuir en las zonas de secano el grado de incertidumbre en la toma de decisiones. En la medida que los datos puedan proveer registros periódicos que den continuidad a las observaciones, será posible obtener resultados ajustados a la realidad del fenómeno que se estudia.
La distribución gaussiana, es un concepto estadístico que describe cómo se distribuyen los datos alrededor de un valor promedio. Tiene una forma característica de “campana” que muestra cómo los valores se agrupan alrededor de un valor promedio. Esto significa que vamos a tener menos datos en los extremos y más datos hacia el punto central. Está completamente determinada por dos parámetros: la media (o valor promedio) y el desvío estándar, el cual es una variable aleatoria que se utiliza para calcular la variación o dispersión en la que los puntos de datos individuales difieren de la media.
Estos parámetros nos ayudan a comprender cómo se extienden los datos alrededor del valor medio y qué tan dispersos están.