Las sidras riocoloradenses son furor y, la isla de Choele, ¿duerme la siesta?

Las sidras que produce la ciudad de Río Colorado parecen no tener techo y generan comentarios cada vez más positivos. Productos como la Juliá y Echarren y Txapela cosechan elogios en distintos escenarios. Mientras tanto, la región del Valle Medio rionegrino, con miles de hectáreas bajo riego, plantaciones de manzanas y peras todavía destacadas, instalaciones en desuso pero que con algunos ajustes podrían habilitarse y una mano de obra joven ansiosa por capacitarse y trabajar en una industria dinámica, no tiene ninguna sidra para presentarles a propios y extraños. Tiempo atrás, en una de mis charlas con el ingeniero Alcides Llorente, lo consulté y me dio su diagnóstico muy positivo en relación a la posibilidad de desarrollo de emprendimientos de este tipo. Sin embargo, coincidíamos, la dirigencia política no acompañaba.

Hoy por hoy, siguen proliferando la aparición de organismos estatales de dudosa importancia y funcionarios de distinto tipo pero está claro que lo que se necesita son dirigentes comprometidos con la región y que promuevan la creación de cooperativas, respalden a los privados y les abran las puertas a los más jóvenes, involucrándolos en proyectos de capacitación y desarrollo de emprendimientos. La experiencia de Río Colorado revela que se puede, es decir, si hoy la isla de Choele Choel no tiene un producto competitivo en el mercado es por falta de voluntad política. Esperemos que algún dirigente nos sorprenda, no se limite a buscar votos en tiempo de elecciones y se ponga al frente de iniciativas productivas.

Un comentario en “Las sidras riocoloradenses son furor y, la isla de Choele, ¿duerme la siesta?

  1. El Maestro, y giornalista profesional universitario, nos viene pidiendo a gritos » que de una vez surjan «dirigentes comprometidos con la región, que promuevan la creación de cooperativas» proyectos de capacitación y desarrollo de emprendimientos». En definitiva: es el comienzo de un plan microeconómico completo. Da como ejemplo: «La experiencia cooperativa de Río Colorado revelando que se puede: es decir, si hoy la isla de Choele Choel no tiene un producto competitivo en el mercado es por falta de voluntad política».

    Hasta aquí marca a fuego la NECESIDAD, pero no creo necesario señalar la escasa voluntad política, y a su vez, no mencionar taxativamente la participación privada aunque en el caso de Río Colorado «comparte con el movimiento Cooperativo».

    Conociendo ambos márgenes de la costa, como quien dice: a) Luis Beltrán perdió en la década 50/60, CREO RECORDAR, el único sector de acumulación del sistema, circunscripto a las cooperativas de distribución y de Consumo.(b) Las demás, generalmente, necesitan mucha profesionalidad dirigencial y capital, libre de aplicación, para que sean exitosas.

    Esa es la causa de la desaparición de cada intento.

    HANS
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